Consejos para evitar la flacidez y encontrarte más bella

Evita la flacidez con estos consejos

Hay muchos signos de la edad que no queremos que aparezcan en nuestro cuerpo. Uno de los más preocupantes, ya que se observa más fácilmente y no es fácil de eliminar es la flacidez. Cuando nuestra piel pierde tersura y densidad y comienza a descolgarse, resultando en ocasiones antiestético.

Aunque la piel pierde tersura con la edad de forma natural, existen una serie de hábitos que puedes implantar en tu día a día y te ayudarán, llegado el momento, a que tu piel no se muestre tan flácida. Este proceso ocurre porque nuestro cuerpo ya no genera tanto colágeno como antes. El colágeno es una sustancia que se encarga de darle estructura a nuestra piel de modo que puede mantenerse firme. Esta disminución en la producción de colágeno comienza a ocurrir tras superar la treintena, de modo que a partir de esa edad será recomendable poder consumirlo como suplemento en nuestra dieta. El cuidado de los músculos también será fundamental, tal y como veremos a continuación.

Repasemos ahora algunos consejos esenciales para que en futuro tengas una piel bonita, sana y tersa.

Cuida de tu alimentación para evitar la flacidez

Debes cuidar lo que comes para permitir que tu piel y tus músculos estén sanos y así resulten más bellos. Procuraremos incluir en nuestra dieta al menos dos raciones diarias de proteínas ya que estas son las que componen los músculos y la piel. El colágeno está presente en algunos alimentos como las carnes o los huevos, de modo que estaremos ayudando a mantener la estructura firme de nuestra tez. Estos alimentos también ayudan a crear y mantener una musculatura más fuerte que pueda sostener bien los tejidos.

Para un efecto patente tomaremos suficiente vitamina C. Esta famosa vitamina ayuda a que podamos sintetizar colágeno, de modo que estima en cierta forma la propia elaboración de esta sustancia tan importante. Además tiene un efecto antioxidante al atrapar las moléculas conocidas como radicales libres que se han relacionado en varios estudios con el envejecimiento celular.

Seguiremos las recomendaciones generales para una dieta saludable, como es eliminar de nuestra alimentación alimentos procesados o con azúcares añadidos, en definitiva aquellas grasas que resultan perjudiciales. Un buen truco para localizar los alimentos donde se podemos encontrar estas sustancias es intentar evitar la comida rápida y los productos precocinados e industriales. Lo mejor es siempre poder cocinar en casa todo lo que comemos.

Ten mucho cuidado con las dietas milagro o con otras que no hayan sido especialmente diseñadas para ti. Este tipo de dietas eliminan de la dieta alimentos y sustancias muy relevantes para nuestro buen funcionamiento y para mantener una buena salud. La mejor dieta es aquella que te permite tomar de forma equilibrada todos los grupos de alimentos. Recuerda que la pérdida brusca de peso se refleja en una piel más flácida. Pierde peso de forma uniforme para evitar este indeseado efecto.

Hidrátate bien

La hidratación debe realizarse en todos los frentes. Esto quiere decir: externa e interna. Debes beber lo suficiente a lo largo de todo el día. Recuerda que cuando tienes sed es porque tus células ya se han deshidratado un poco. Evita eso bebiendo agua de forma frecuente a lo largo del día. Se recomienda ingerir dos litros de agua diaria, pero te obsesiones si no te apetece beber más no te fuerces.

Recuerda que la forma de hidratarse no es solo bebiendo agua. Puedes optar por consumir té o zumos que también te aportarán líquidos sin aburrirte. Las frutas, verduras y todos los alimentos en general contienen agua y esto es también un importante valor añadido.

Sobre la hidratación externa, hablaremos principalmente de los productos cosméticos destinados a este fin. Entre ellos destacan aquellos con propiedades reafirmantes y tensores. Pregúntanos en NuevaFarma sobre este tipo de cosméticos. Te recomendaremos aquellos que tengan entre sus principios activos la granada, el gingko, colágeno o kigelia africana. Aplica con productos con movimientos circulares en un suave masaje que ayudará a que penetre más profundo.

Si eres joven, con una edad por debajo de los 35 años, no debes aplicar los productos antes mencionados, sino que debes procurar que tu piel esté siempre limpia y bien hidratada. Puedes aplicar los otros consejos que te damos aquí ya que no solo evitarás la futura flacidez sino que te ayudarán a llevar una vida más sana.

Hábitos de belleza

En general se recomienda huir del agua muy caliente. Las altas temperaturas como las que se generan en las duchas muy calientes, saunas o jacuzzis tienen la propiedad de que la piel, y en general, el cuerpo pierda su hidratación de modo que favorecemos la flacidez. Si bien estos rituales tienen algunos beneficios como la relajación y la eliminación de toxinas al estimular la orina, no debemos abusar de ellas. Una al mes será suficiente.

Para lograr un efecto estimulante en la piel, aplicaremos frío en las zonas que nos interesen o en todo el cuerpo en general. Una buena idea es terminar la ducha con unos minutos de agua muy fría, esto estimulará la circulación y ayudará a nuestra piel a estar más tersa.

Recuerda ser constante con tus hábitos, limpia tu piel a diario y aplica los productos seleccionados para lograr disfrutar de todos sus beneficios.

Buena salud física, buena salud mental contra la flacidez

El estrés y sentir con frecuencia emociones negativas liberan radicales libres que, como hemos dicho, favorecen el envejecimiento de las células. En este sentido, el deporte se presenta como una buenísima opción, tanto para mantener una buena musculatura como para poder liberar las tensiones. Prueba con deportes que te permitan realizar prácticas aeróbicas suaves, son las mejores para mantenerte siempre activa. Si deseas combatir con más intensidad la flacidez puedes optar por deportes como el spinning o el body combat que trabajan en la tonificación muscular.